Somos personas que nos encontramos en un proceso de descubrimiento, y aprendizaje de cómo aprender y enseñar utilizando la tecnología
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lunes, 6 de febrero de 2023
Opinión de las redes sociales por Tábatha Fabis
Pienso que no es recomendable dejar de usar las redes sociales solo por los peligros que puedan traer, ya que, en la vida, siempre existirán esos peligros sin importar si dentro o fuera del internet. Sin importar el ámbito que sea, el lugar o el tiempo, siempre habrá personas que usen métodos cuestionables para conseguir lo que quieren, incluso si eso llega a dañar a otros, por lo mismos siempre existirán las estafas y los engaños. Los humanos somos tantos y tan complejos y diferentes moralmente que sería imposible que todos pensemos o actuemos de la misma forma, es una irresponsabilidad para nuestra seguridad y la de los demás creer en algo tan ingenuo, en especial si tenemos la facilidad de comunicarnos por medios que ocultan nuestra identidad como lo es presentarnos tras una pantalla. Lo mejor que podemos hacer como personas responsables es ser conscientes de los peligros que nos rodean para saber cómo hacerle frente. Cualquier cosa puede convertirse en un arma y un peligro, solo debemos estar atentos.
Como dice el dicho en el libro de “El arte de la guerra” de Sun Tzu: “Conoce a tu enemigo y conócete a
ti mismo, y saldrás triunfador en mil batallas”. Lo mejor sería educarnos sobre el tema, para saber cuándo está sucediendo y saber qué hacer para enfrentar la situación. Como si de una enfermedad se tratase, hay que estar atentos a los síntomas, y aceptar su existencia, y que puede pasarle a cualquiera, para poder saber cómo tratarlo, si nos llega a suceder. Y no solo saber cómo enfrentar el problema cuando suceda, además todos deberíamos educarnos para saber cómo evitarlo en su mayoría.
Dejar de hacer algo, que además viene con sus propios beneficios y mejoras, solo porque alguien encontró una manera de usarlo para beneficiarse y perjudicar a otros, sería lo mismo que vivir la vida de forma muy limitada, y andar siempre con un miedo que nos evita disfrutar de los beneficios que nos puede traer algo. Claro, que tampoco hay que ir por ahí sin tomar las precauciones adecuadas. Es de especial importancia que los más jóvenes tengan en cuenta esos peligros que pueden encontrar en las redes sociales, ya que están en una etapa de sus vidas dónde son muy moldeables y que pueden ser manipulables. Ellos tienen que saber lo más básico cuando usan las redes sociales, como qué tipo de personas pueden encontrarse, o de qué manera alguien con malas intenciones puede acercarse a ellos y conseguir lo que quieren y dañarlos en el proceso, qué tipo de información en seguro que deban de compartir o cuanta de ella, y cómo proteger esa información y a ellos mismos. Tienen que tener la confianza de un adulto cercano, real y fuera de la pantalla, alguien confiable que ellos conozcan de verdad, que pueda orientarlos y con quienes puedan hablar si en algún momento se sienten inseguros o que les ayude si se encuentran con alguien que les exige información personal o encuentros físicos en internet.
Y no solo ellos tienen que saber esas cosas, los adultos también nos podemos meter en problemas si no sabemos los cuidados más básicos. No solo existe el peligro de las estafas y los engaños, también hay que cuidarse de los virus, los acosos, los robos de cuentas, etc. Si no tenemos cuidado, o no nos informamos lo suficiente, o no tomamos las medidas a tomar para cada caso, podemos perjudicarnos, en lo personal, en lo laboral y financiero. El peligro viene tanto para un adulto como para un menor de edad.
Y mientras todos tenemos nuestra libertad de decidir cuanta información compartir con los demás, o con quien/es, a pesar de que no es recomendable compartir algo intimo o ser descuidados con nuestra información personal, también debemos tener cuidado con la información que nosotros ponemos.
Aunque no veamos a la otra persona al otro lado de la pantalla, hay que tener consciencia de que ser groseros o despectivos, incitar el odio o ser crueles con otros, o compartir información de la cual no estamos seguros de que sea real o efectivo, puede dañar a quienes vean esa información. También hay que tener cuidado con las cosas que enseñamos. Como por ejemplo, muchos comparten tutoriales en internet, y dan consejos o tips de variedad de cosas, y si no es seguro o no se conoce a profundidad del tema, otros pueden seguir esos consejos o compartirlos con otros sin saber que están haciendo más daño que ayuda.
Debemos ser conscientes también de que no toda la información que leemos o vemos en internet puede ser fiable o cierta, lo que puede provocar un entorpecimiento en el aprendizaje. Por eso no hay que fiarnos en una información si solo se ha visto una sola vez, o por solo una o dos fuentes. Especialmente las personas que enseñan o comparte esa información, deben saber cuál es seguro y cuál no, ya que transmitir ese conocimiento a otros, sobre todo a los estudiantes, puede empeorar su desarrollo, en vez de ayudarles.
Hay que tener mucho cuidado cuando se usan redes sociales para dar clases, no solo por lo que ya mencioné anteriormente, sino que también porque las redes sociales pueden ser un distractor al momento de aprender.
Aunque dije muchas cosas que son negativas del uso de las redes sociales, solo son las cosas a tener en cuenta. Lo beneficios entran, si se usa bien, en ser más sociales y poder expresar nuestras opiniones, de compartir información que a otros les pueda interesar o hacerle más fácil de encontrar.
Nos podemos conectar y saber lo que sucede al otro lado del mundo, y contactar a las personas desde la distancia. Podemos hacer muchas cosas buenas y sería una pena no poder hacerlo solo porque en el mundo hay personas que lo usan mal, sobre todo si tenemos manera de hacerle frente.
También quiero aclarar que, a mi parecer, aunque no debemos dejar de usar las redes sociales por los posibles peligros que nos podamos encontrar, también tenemos la libertad de decidir si usarlo o no, o cuáles usar y cuáles no, o cuánto de nuestro tiempo dedicarle.
Debo cohibirme de usar las redes sociales por sus peligros? por Sidonella Yépez
Cualquier cambio que se introduzca en la sociedad, no importa el ámbito en el que se aplique, representa un riesgo si se usa de forma incorrecta, y el avance tecnológico no se escapa de esto.
Es importante prestar atención en el uso correcto, o la mejor manera de utilizar todas las innovaciones que se nos presentan, especialmente en el campo de la tecnología Los avances tecnológicos nos afectan en diferentes ámbitos de la sociedad, pero el que nos ha abrumado más es, sin lugar a dudas las redes sociales. Estos programas, páginas, aplicaciones, etc tuvieron un gran impulso durante la pandemia, ya que su funcionalidad nos permitió mantener el contacto personal, laboral y académico en ese tiempo en el que estuvimos recluidos. Precisamente por la facilidad de acceso y la penetración en los distintos círculos sociales es que las empresas de todo tipo se volcaron a explotar este terreno. Las redes sociales se han vuelto una pantalla de acceso para todo tipo de actividades: juegos en línea, intercambio de información, comunicación familiar, educación a distancia, trabajo, entre otros. Es por esta gama de actividades que en ocasiones perdemos la noción del medio que nos rodea: no atendemos correctamente a las personas que viven o trabajan con nosotros, procrastinamos las actividades o tareas que debemos cumplir de forma presencial, no cuidamos el tipo de contenido que compartimos dependiendo de la edad de las personas que puedan tener acceso a él, incluso nos dejamos llevar por las ofertas y compartimos información personal sensible. Debemos tener claro que si esta situación se nos presenta a los adultos, en los jóvenes también se observa, por lo que es importante educar y educarnos con las mejores prácticas para el uso de la tecnología, y recordar que no es sólo hablar por hablar, sino que el ejemplo es la mejor manera de que enseñemos y de forma significativa Algo que mueve, especialmente a los jóvenes es el número de contactos, conocidos o personas que vean e interactúen con el material que se publica en las redes. Es necesario tener claro que el hecho de tener cientos de amigos en las redes, o contactos en cualquier aplicación no quiere decir que nos conozcan. Incluso en la vida cotidiana nosotros no vamos mostrando nuestra casa a cualquiera que recién conocemos, mucho menos compartimos información muy personal. Por esto se debe clasificar el material que se publica y determinar a quién va dirigido el mismo. Para esto es importante hacer grupos de contactos (familia, colegio, trabajo, hobbies, público general), que nos permitan dirigir correctamente la información que vamos a publicar, de manera que se pueda controlar el acceso al contenido Tal como comenté anteriormente, si las personas que hacen vida junto a nosotros (compañeros de trabajo, vecinos, etc) no nos conocen en realidad, mucho menos nos conocen los contactos virtuales de las redes sociales. Algo que hace esta situación un poco más complicada en la virtualidad es que si no filtramos quién es el que tiene permitido ver nuestra información, todo lo que hemos subido en las redes lo puede acceder cualquier persona que no conozcamos, y no sabemos el uso que le pueda dar a ella. Esto es muy importante ya que, en caso de robo o pérdida de alguno de nuestros dispositivos, los ladrones pueden acceder a la información de nuestros conocidos también. Otra cosa que se debe tener en cuenta a la hora de publicar cualquier información en las redes es que esta no se borra. Cualquier foto, noticia o comentario, positivo o negativo, con el que estemos relacionado en las redes queda como una sombra sobre nosotros, y su uso dependerá de la persona que tenga acceso a ella. Esta es un hacha de doble filo, ya que actualmente la investigación de antecedentes personales en la web es una práctica común en cualquier empresa o instituto de educación a la hora de estudiar a los candidatos para optar a puestos de estudio o trabajo. La identidad digital es como un tatuaje que nos define en las redes, y que no podemos eliminar, y así como no nos vamos a imprimir en la piel algo con lo que no nos sintamos identificados o que signifique algo importante, lo ideal es que nuestro perfil refleje nuestra personalidad real. El reconocer si un perfil es falso no es fácil, por esto es importante que se tenga cuidado a la hora de entablar relación con nuevos contactos. Esto es muy importante sobre todo en los jóvenes, ya que el ciberabuso es una situación muy frecuente. Para esto es importante conocer los canales de denuncia y educar a los jóvenes sobre las acciones que se deben realizar para evitar este tipo de situaciones, principalmente que no se debe confiar abiertamente en alguien que no conozcamos directamente y en forma presencial La cantidad de información en las redes no tiene límite. El tipo de información es muy variado y no tiene censura. No importa la edad de la persona que esté navegando en la web, los buscadores ofrecerán el listado de los contenidos que se ajusten a los criterios de búsqueda. Esto representa un peligro para los jóvenes, ya que pueden acceder a información peligrosa, no veraz, o no apropiada a su edad, por lo que es muy importante la educación y vigilancia de la vida virtual de los jóvenes, de manera de poder prevenir situaciones de riesgo. Enseñar a los jóvenes el buen uso de las redes, repercutirá en una mejor sociedad futura Para finalizar, debemos estar claros que no se puede tapar el sol con un dedo, por lo que hay que aceptar las redes sociales como parte de nuestra realidad, y adaptarnos al continuo avance en las comunicaciones; así que, respondiendo a la pregunta inicial, la solución al peligro en las redes sociales no es evitarlas, sino aprender a usarlas de una forma lo más segura posible. Si hiciera una analogía con la vida cotidiana pudiera decir que al cruzar una calle siempre hay riesgo de que un carro nos atropelle, sin embargo, desde temprana edad aprendemos las leyes de tránsito que nos dan seguridad para poder cruzar con confianza la calle, pero esto no evita que pueda ocurrir un accidente y al final nos atropelle un carro. Es un ejemplo bastante dramático, pero considero que la seguridad en las redes debe ser tomada con seriedad. Las sugerencias generales para el buen uso de las redes sociales son muy fáciles de seguir, entre ellas la más importante es tener un antivirus actualizado; configurar la privacidad de las nuestras redes sociales; utilizar contraseñas complejas, con mayúsculas, minúsculas, números y caracteres especiales; evitar los formularios que soliciten información personal; verifica el dominio de las páginas que visites; evitar sincronizar tus cuentas personales y redes sociales; no seguir personas desconocidas o aceptarlas en tus redes sociales; no usar redes públicas a menos que sea para búsquedas puntuales sin compartir ninguna información: hacer compras online en site que tengan certificado de seguridad y digan en la barra https Siguiendo estas sugerencias, seremos capaces de tener una participación activa en las redes sociales, y de esta forma no quedaremos excluidos de ninguna actividad personal, laboral o académica que se realice en nuestro entorno, ni nos sentiremos inseguros a la hora de realizar actividades virtuales